La Gramola II

Timmy BoyIndie, Jazz-Blues, Míticos, Nuevos Descubrimientos, PostLeave a Comment

Esta semana ha sido la oficial inauguración de la temporada estival, muy buena noticia para los madrileños a los que nos gustan las terrazas caras, petadas y plagadas de polen, exquisitas. Muchas veces me pregunto, ¿qué se nos ha perdido en esta ciudad?

Nah, puro lloriqueo. El pasado martes estuve disfrutando de un magnífico Foxtrot en una estupenda terraza y con la mejor compañía, así que nada de quejarse, hoy me siento afortunado y animado.

Así que aprovechando mi posible fugaz excitado estado anímico, procedo a introducir los discos correspondientes.

Django Reinhardt – Django Reinhardt

Django Django Django, tú sí que sabes lo que significa ser el puto amo. Siempre seré tu fiel y humilde vasallo.

Si tuviera que describir seriamente la música de Django Reinhardt, supongo que tendría que entrar a valorar las maravillosas virtudes técnicas de su guitarra, alabar sus capacidades y composiciones, pero no, aquí no estoy para eso, estoy para escribir lo que me sale.

Lo que siempre he valorado de este hombre y de sus compinches es su música en sí, esa alegría, ese ánimo, esa jodida actividad que te transmite, puro movimiento. Me parece que es 100% positiva y que como terapia emocional deberían empezar a tomarla en cuenta, joder, para algo la escuchaban en los bares de los años 30, ¿no?, deberíamos aprender algo del pasado.

En cuanto al disco que os voy a poner de él, pues no sé, este mismo. Tenemos que plantearnos que en esta época no existía el concepto de disco estricto como tenemos ahora, ellos iban a tocar y ya está, por lo que os he puesto este mismo, pero vamos, que cualquier otro es igual de cojonudo.

Little Joy – Little Joy

Este grupo se podría decir que es una nueva incorporación en mi biblioteca musical. Me lo recomendó un amigo no hace demasiado tiempo y me encantó desde el primer momento.

¿Qué tiene este disco? pues sonidos agradables y positivos que me llevan a la playa con mis amigos, cerveza en mano, of course. Me transmite buen karma y por lo tanto creo que merece ser escuchado.

Su primera canción me parece increíble, pero últimamente mi favorita es «No One’s Better Sake», ese comienzo, la voz del cantante, el ritmillo general, muy genios.

Quién sabe, a lo mejor este disco me lleve a conocer nuevos grupos brasileños que merezcan la pena, ojalá.

Share this Post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.